Milagro en Roma: el Vaticano quiere beatificar a Cristina Kirchner por "llorar con las orejas"

ROMA.- En el día de ayer, una especie de milagro se vivió en la embajada argentina en Roma, cuando Cristina Kirchner lloró frente a las cámaras. A parte de esta demostración de humanidad que tira por la borda muchísimos trabajos antropológicos que se han hecho sobre la personalidad de la presidenta, luego del imprevisto varios testigos oculares del hecho entraron en una especie de trance místico, reviviendo las mejores épocas del concilio de Nicea (?). ¿La razón? Las lágrimas de Cristina no salían por sus ojos... sino por sus orejas.

Ante los gritos desesperados, el personal de seguridad de la embajada expulsó a los espectadores del milagro, quienes rápidamente obtuvieron una copia de la cinta y la llevaron al Vaticano. Allí, tras un largo debate a puertas cerradas donde concurrieron varios sumos pontífices, la Iglesia Católica no pudo ponerse de acuerdo.

Si bien la veracidad de la cinta fue confirmada unánimemente, la veracidad del milagro dividió a los eruditos con sotana en dos grupos: el primero, que se autodenominó el "ala izquierda" del Vaticano, afirmó que el milagro era real e inexplicable, y que por eso la investigación debía continuar para poder canonizar a Cristina; el segundo grupo, en cambio, que se autodenominó el ala "científica o escéptica" de la Santa Sede, dio una explicación racional y harto lógica del hecho, a saber: que las múltiples cirugías plásticas a las que aparentemente se habría sometido la presidenta en su rostro, corrieron "todo de lugar" y por eso las glándulas lacrimales de la presidenta se hallaban detrás de sus orejas y no, como ocurre con la mayoría de quienes no pueden financiarse estas costosas operaciones, dentro de los ojos.

Además, el ala científica advirtió, para evitar ánimos milenaristas en los ya de por sí estupefactos italianos, que es muy probable que en las próximas horas vean a Cristina "comer por los ojos, respirar por el mentón, hablar por una ceja y tocar una mazurka de Chopin con las muelas de juicio".

Cristina Kirchner en pleno acto (o actuación).